Sólo los artistas marciales saben pelear…

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«El boxeo no es real porque no tiene patadas«. «Mi estilo es mucho más marcial porque atacamos a los puntos vitales«. «En la calle no hay un árbitro que pare el combate«. «En la calle no hay reglas«.

¿Lo has escuchado alguna vez?. Yo muchas y la realidad es que algunas partes son ciertas. En boxeo no se dan patadas. En los deportes de contacto se usan protecciones y se limita el uso de ciertas técnicas. Las reglas, que están para proteger al competidor, determinan de un modo decisivo la técnica que éstos usan y en muchas ocasiones generan vicios que en una situación diferente al de su reglamentado método de combate, son de un altísimo riesgo.

Todo eso, es rigurosamente cierto.

Pero hay algo que se olvida con demasiada facilidad. Con o sin reglas, los deportes de contacto, buscan vencer de forma manifiesta, contra un rival que también quiere ganar. O sea que dentro de sus reglas, pelean con todo el realismo posible contra adversarios que no solo no colaboran sino que se oponen con violencia.

Si observamos un combate de boxeo, vemos que se lanzan un gran número de golpes, pero que muchos de ellos no llegan a dar en el blanco y que cuando lo hacen, raramente suponen un KO inmediato (Tyson parte). Y eso le pasa a gente que SI quiere golpear con contundencia y que no «frena la manos».

Por contra si contemplamos una demostración de cualquier arte marcial, el maestro cada golpe que usa, contacta con el rival, cada técnica es definitiva y nunca «recibe» por parte del compañero de exhibición, que seguramente es su alumno y no un «igual».

Es cierto que en un enfrentamiento deportivo, cuentas con ciertas garantías de que «sí» y de que «no» va a suceder. No vas a ser atacado antes de sonar la campana, el combate se va a realizar dentro de un ring, sólo vas a tener, pase lo que pase, un rival, no hay posibilidad alguna de que nadie use armas, no necesitarás huir si pierdes, porque no te van a rematar en el suelo…

Por eso «tanteas» al rival, lanzas técnicas sin la certeza plena de que van a ser definitivas, te permites estrategias «suicidas» como cansar al contrario encajando sus golpes…

En una situación «real» lo último con lo que cuentas es con certezas, no sabes ni lo que va a pasar ni a que te vas a tener que enfrentar al siguiente segundo. No existe la opción de «vencer por puntos o decisión arbitral». O ganas, o pierdes, o escapas. Y no hay mucho más.

Vistas así las cosas, eres muy «conservador» a la hora de pelear. Arriesgas lo menos posible, pues un error puede ser el inicio de una verdadera catástrofe, mucho mayor que una simple derrota. Cuando tienes la oportunidad de colocar una técnica, lo haces del modo más contundente posible, porque lo mismo la oportunidad no se repite y cuando el rival vea la suya, si será «decidido».

Esto determina mucho que las técnicas que se usan en un arte marcial sean potencialmente «mas peligrosas» que las que se ven en un deporte de contacto. Y también que para entrenarlas, necesitemos ceder un poco ante el compañero para que las pueda aplicar sin riesgo real de lesionarnos gravemente. Su potencial peligrosidad nos obliga a practicarlas con absoluta falta de realismo. Con lo que su peligrosidad y sobre todo nuestra habilidad real de usarlas, es algo también potencial» y raramente «probado».

Pero olvidamos un detalle fundamental. Más allá de lo duras que sean nuestras técnicas, en una situación «real» está el rival que no se las deja aplicar. El que se mueve y las devuelve, el que quiere hacerte daño para que tú no se lo hagas. Y en eso, en este sutil aspecto de dar tortas a quien no las quiere recibir pero si repartir, los deportes de contacto tienen una experiencia más que evidente y son «los expertos» en quien mirar para aprender.

En una situación real y por lo tanto al realizar un entrenamiento con miras «realistas», debemos evitar estrategias de «desgaste», debemos evitar lanzar golpes sin tener una alta probabilidad de impactar, pero hemos de asumir, que vamos a fallar, que nos van a golpear y que las cosas no suceden del modo idealizado al que estamos acostumbrados en nuestras sesiones de entrenamiento «marcial».

La práctica deportiva conlleva graves carencias técnico-estratégicas si lo que buscas es un arte marcial enfocado a la defensa personal. Y lógico que así sea, si lo que buscan es ganar en un ring, es de tontos perder ni un minuto en algo que no sea precisamente eso. En una competición especializada, gana el mejor especialista y raramente el más versátil fuera de ese ámbito.

La práctica «marcial tradicional», adolece gravemente de falta de realismo. Usar protecciones e introducir el contacto, mantener puntualmente el contacto y eliminar las protecciones…, son cosas que se deberían hacer si queremos introducir el factor de realidad que falta en nuestra práctica.

«Ya, pero es que eso es peligroso, eso duele, te lesionas…».

Pues si, es verdad, pero eso es lo que hacen cada día los que practican deportes de contacto. Si no estás dispuesto a hacer lo que ellos hacen y además, perseverar en lo que tú tienes y ellos no, mejor no uses frases despectivas respecto a los deportes de contacto. Porque aunque su técnica «no vale nada, no es real…» y todas esas tonterías, ellos, con esas «pobres técnicas», son mucho mejores artistas marciales que tú.

Y si de verdad quieres practicar con realismo, compra protecciones o si eres más valiente, entrena tu qigong duro para soportar los golpes e introduce el contacto, gradualmente pero de forma generosa, en tu entrenamiento. Limita las técnicas más lesivas, pero actúa como si el compañero no fuera a hacerlo. Si tu compañero se expone gravemente zonas protegidas por las reglas, dale un ligero toque que le recuerde que «en la calle no hay reglas», o dale con fuerza «cerca», para que vea el peligro al que se expone.

Cuando hayas hecho de esto tu costumbre, entonces y sólo entonces permítete decir frases como las que iniciaban este artículo…, si es que aun te las crees.

15 Respuestas

  1. fernando veira

    Yo creo que cualquiera que entrene seriamente lo hará salteándose los adjetivos. Casi nunca falla que el que defiende lo suyo atacando lo de los otros, suele ser un «paquete». La defensa personal es algo totalmente diferente a un combate deportivo por una simple cuestión de objetivos. Incluso las técnicas marciales o militares no son aplicables 100% a la vida civil. El objetivo de un militar es llevar a su unidad al éxito, incluso si tiene que morir en el intento, es decir, cumple una función grupal. El objetivo de cualquier civil es llegar a casa entero, cumple una función absolutamente individual.
    Personalmente creo que intentar imitar la realidad de un combate es una utopía, ya que para eso tendríamos que luchar «de verdad» por nuestra vida o integridad física.
    Los reclamos de «realidad» (en un principio esgrimidos por los practicantes de kick boxing en los 80, luego los de BJJ en los 90 y actualmente por los de la MMA) son absurdos por muchas razones. Tener pocas reglas no significa no tener ninguna. Estar en un ambiente controlado donde el objetivo es ganar, no causar daño, cambia mucho la cosa. Como decía un entendido «si te dijeran que cuando haces el clinch en boxeo te pueden arrancar una oreja a lo Tyson, a ver si haces el clinch de la misma manera».
    Por supuesto las reglas son necesarias, incluso cuando intentas prepararte para la realidad. Creo que lo que más se puede hacer es entrenarse psicológicamente para el momento de estrés, superar el miedo al dolor, el miedo a golpear, en definitiva, el miedo y, de alguna manera, limitar una serie de alarmas que activan nuestra amígdala cerebral, porque cuando se activa, nuestras facultades se vean limitadas de una forma en que perdemos totalmente el control de la situación, algo que siempre es un inconveniente. En ese estado solo «huimos o luchamos», pero si luchamos veremos mermados nuestros recursos defensivos de manera estrepitosa.
    Dicen que la defensa personal (ciudadana) es un 80% actitud y un 20% aptitud.
    La mejor y más difícil técnica de autodefensa es NO PERDER LOS NERVIOS.
    Evaluar riesgos, vías de escape, obstáculos, la superficie en la que estoy parado, la iluminación,…comprender el escenario es casi tan importante como saber que técnica aplicar. Esto en un ring o en un dojo no se reproduce nunca. Imaginaos en un combate de MMA donde bajan las luces al minimo y/o arrojan cristales rotos al tatami…o dejan entrar a varios atacantes «amigos» del que tienes tumbado en el suelo…es imposible en un espectáculo deportivo, pero es absolutamente factible en la vida real.

    Por supuesto no hay que ponerse la etiqueta del «mas marcial del barrio». Solo ponérsela es decir que eres un paleto marcial. Una cosa es que los deportes de contacto no sean realmente artes marciales (estoy convencido de que no lo son) otra muy diferente decir que no sirven para nada. Lo mismo los deportistas deberían guardar silencio respecto a los artistas marciales tachándolos de obsoletos.
    En la defensa personal no hay tiempo para medir al contrario, bailar a su alrededor encontrando huecos…tampoco sirven vistosas posturas con secuencias prefijadas…
    Porqué muchas técnicas se dicen obsoletas? Simplemente porque no pueden usarse de forma deportiva, como los bloqueos clásicos, que no se usan porque no se pueden realizar con los guantes.
    De la misma forma no puedes trasladar una técnica callejera al ring, estarás fuera de tu elemento y o te descalificaran o te darán una paliza.
    Cada uno a lo suyo.
    Eso sí, son generalmente los deportistas de contacto los que se burlan de los artistas marciales.

    Buen articulo

  2. Saul

    Un muy buen artículo. Que refleja con mucho realismo situaciones que se repiten en el día a día del entrenamiento en artes marciales. He visto, oido y leido muchas veces el tratamiento despectivo que muchos «artistas marciales» sueltan sobre los deportes de contacto.

    Cito la respuesta previa: en donde se defiende la supremacía de las artes marciales para la calle pero al mismo tiempo se indica «Creo que lo que más se puede hacer es entrenarse psicológicamente para el momento de estrés, superar el miedo al dolor, el miedo a golpear, en definitiva, el miedo»……justo el entramiento que vas a tener entrenando cualquier deporte de contacto.

    Y es que el entrenamiento con contacto se hace impredicible para aplicar aquello que entrenamos en el día a día…..el timing y el sentido de la distancia, el saber lo que es que te lleguen golpes fuertes, el saber recomponer tu estuctura cuando de descolocas en una situación de estrés, y mil habilidades más que adquieres con ese tipo de entrenmiento, se imponen a las mejores técnicas y teoría de combate. Por suerte los sistemas marciales van añadiendo poco a poco este sistema de entrenamiento. Un amigo que ha estado haciendo un pequeño tour por japón me comentaba que en los dojos de shotokan que el visitó en su viaje se entrenaba -a parte de otras formas- a pleno contacto. El krav maga y otros sistemas modernos han adquirido métodos de entremiento de deportes de contacto aplicados a un entorno más marcial, como lo hacen gente de wing chun como allan Orr -entre otros-.

    Tengo visto que a un buen sistema le sacas el jugo probándolo, viendo que lo parece fácil luego no sale cuando el rival se resiste mucho y partiendo de ahí para aplicar los conceptos en un entorno más hostil. Con cierto ojo, claro, sin matarse entre compeñeros pero aprendiendo a aplicar tu sistemas cuando el tio que tienes delante de ti va a pegarte, a imponerse. Desde ese punto de vista meter armás o más oponentes o ambas cosas ya se trata con otro respeto – si derrotar al tio que hay delante de ti es difícil sin armas, añade un cuchillo, o más atacantes a la ecuación y se ve lo terriblemente dificil que es salir bien de esas situaciones….y la habilidad REAL que debemos adquirir para ello.

    Me encanta el mensaje de este articulo que yo entiendo como «Entrena más, entrena más real, aprende a aplicar y no vivas de ilusiones y de teorías maravillosas no probadas por ti»

  3. Chiquitín

    Cuanta razón tienes, Antonio… y que buena reflexión Saúl, el resumen final es exactamente como yo lo interpreto
    Creo que el error radica en buscar una «supremacía» … todo es válido, si se entrena con la seriedad adecuada … se busca y consigue el mismo fin (vencer a tu rival) de maneras diferentes. Y yo he aprendido a respetarlas absolutamente todas.
    Los hay que prefieren proyectarte, meter cadera con cadera y lanzarte varios metros para que el adoquín haga el resto. Los hay que prefieren usar cuñas ofensivas y una avalancha de golpes cortos y contundentes. Los que prefieren el uso de armas como un bastón, un kubotan o (en extremos rara vez vistos por nuestro país… por suerte) un arma blanca (hablamos de formas «marciales» de su uso, es decir de estilos X o Y, y no de navajeros de barrio… que ojito con estos).
    Yo soy de los que prefiero un buen crochet a un low-kick, un codazo a un crochet, y si la ocasión así lo requiere, un vaso o una botella a un codazo… Es lo que he visto, vivido y sufrido. Como bien dice Antonio, «las reglas no existen» y el «eso no se vale», pierde sentido en la calle cuando con quien te enfrentas es, por ejemplo, el navajero de barrio que comentaba antes… o la jauría de niñatos quinceañeros… o un cabrón curtido, que le suda los huevos (con perdón) que le partas la nariz si con eso consigue romper tu distancia, coger tu cabeza y usarla de aldaba con la puerta del primer coche que se encuentre…. Ahí, más te vale estar preparado, asumir el sentido de la palabra «consecuencia» y apechugar con lo que venga, es decir, ir «a saco» y sin contemplaciones…. lo que pase después, es cosa de enfermeros, doctores, abogados y jueces, ya no estará en tu mano y en esos puntos, vale más la pena preocuparse de que veas la próxima hora de tu reloj lo más entero posible que de lo que dirá o no un juez de aquí a unos meses.
    Otra cosa es el niñato malcriado, que no ha recibido un bofetón en su consentida vida, o el «perdonavidas» discotequero que, después de provocarte, al primer bofetón serio corre a llamar a la Policía y poner la denuncia pertinente…. Con estos no hace falta nada más que un poco de determinación
    En resumen …. el que critica tanto a los deportes de contacto desde las AAMM, como a las artes marciales desde los DDCC, está asumiendo una supuesta «supremacía» de lo que sea que practique o entrene… cosa que es un camino casi directo a la sorpresa y a que te lleves un buen par de hostias el día menos pensado.
    Como siempre Antonio, chapeau!
    Y perdón por el tostón!
    Un abrazo
    Chiquitín

  4. fernando veira

    Yo creo que fundamentalmente hay que entender que los mal llamados deportes de contacto (porque el futbol y el rugby son técnicamente DDCC) tienen una finalidad diferente a las AAMM y por lo tanto técnicas, usos y aplicaciones diferentes. Hay que entender cada cosa en su entorno. Yo prefiero llamarlos «deportes de combate», porque, queramos o no, es un combate, ya sea de pugilato, lucha o ambos.
    Hay cosas que están terminantemente prohibidas en un ring que justamente será lo primero que hagas en la calle.
    Como dicen tanto Saul como Chiquitin, la vida real es otra cosa y hay que ser humilde ya que nunca se sabe como un reaccionara en una situación limite y ese es el tema: La capacidad de reacción. Cuanta gente se bloquea teniendo la superioridad ofensiva y acaba vapuleada?
    Cualquier soldado veterano puede decirte que años de entrenamiento apenas reflejan tus primeros dos minutos en un campo de batalla real.
    Cuando «the shit happens» pueden entrar tantas variables en el algoritmo de la supervivencia que son imposibles de preveer.
    (Es como quererse aprender una técnica para cada situación…cuantas deberíamos saber? 5000…10.000??? )
    Lógicamente con esto no quiero decir que no hay que entrenar.
    Si quiero ganar un campeonato, pues entrenare para ser el mejor de mi categoría, lo que me hará concentrarme en las técnicas que me den mas puntos, no tendría sentido invertir mi esfuerzo en aprender una patada que no puntua; en el otro lado tengo que, si quiero andar medianamente preparado para salir indemne de una situación peligrosa entrenare lo mejor que pueda para aprovechar los mejores recursos que dios me ha dado, a que narices voy a querer dar una patada en salto o aprender a bailar en el ring cuando la hostia puede que venga cuando tenga las manos ocupadas en la bolsa de la compra, o este enciendo un cigarrillo o…bueno, la idea se entiende, creo.
    Yo creo en el aprender a situarse y responder de forma lo mas flexible posible…pero eso es algo totalmente personal.

    Creo que el defecto radica en la antigua creencia de que usar tal o cual golpe nos da una ventaja táctica. Como en la antigua chinaque ciertas sectas tenian su «golpe secreto» y por eso se creían invencibles, lo que es lo mismo que atribuirle un poder mágico a las cosas.

    Una técnica es un envase en el cual tu pones tu habilidad, es un vehículo.
    Pensar que, porque estoy en determinada escuela o porque entreno tal o cual deporte de combate es una garantía «per se» de éxito es tan tonto como pensar que puedo comprarme una bici que me haga correr como Indurain.

    El problema con algunas AAMM es que se han transformado, a la hora de la aplicación «real», en deportes de combate, (dando por sentado de que lo que pasa en un ring es lo mismo que pasa en un aparcamiento en la marugada) y se han olvidado de ciertos elementos de supervivencia. Muchas técnicas tradicionales se han visto injustamente relegadas a la oscuridad (y podría citar pero no quiero que me odien por dar tanto la brasa), básicamente, porque no son vistosas .
    Yo le echo la culpa al show-bussines!!
    ¡Un saludo a todos, amigos!

    Fer

  5. sombrero

    Los seres humanos somos tremendamente vulnerables. En entornos realmente violentos, ni las hoy denominadas artes marciales, ni los deportes de contacto, valen prácticamente para nada. Tan solo para crear, solo tal vez, una pequeña ventana en el gran muro de vulnerabilidad. Negar lo evidente es falso y peliculero. El mundo de las AAMM es un mundo friki, y el de los DDCC, eso, un deporte. ¿De que sirven en ciudades como http://es.wikipedia.org/wiki/Anexo:Ciudades_por_tasa_de_homicidio_intencional ? Seguramente de poco. Es más, en una situación determinada, tal vez te salven de un apuro, pero tal vez puedan empeorar una situación … es un tema complejo.
    Lo anterior no es óbice de que cada cual ame y sienta pasión por su arte o deporte, e intente llegar a las más altas cotas … sin dejar de pisar tierra

    • Chiquitín

      Estaría bien que argumentaras un poco esto que dices …. en que te fundamentas para decir que no es válida dicha diferenciación? (porque yo realmente creo que sí que hay profundas diferencias tanto en el concepto-objetivo para las que fueron ideadas, como en la forma en la que se entrenan y evolucionan)

    • antonioleyva

      La diferencia viene marcada por los objetivos. Un deporte de contacto tiene como objetivo ganar en una competición dentro del marco de unas reglas.
      Un arte marcial tiene según su orientación, ya se militar o civil, como objetivo el primero cumplir la misión, incluso por encima de la supervivencia propia, y en el caso del segundo, conservar la propia integridad a cualquier precio, derrota y huida incluidas.

  6. Davidelmistico

    Empecemos por lo siguiente:

    ¿Qué es un arte marcial?

    Según los significados de «arte» y «marcial» de la RAE, podemos resumir que se trata del entrenamiento y perfeccionamiento de las habilidades de combate, ergo cualquier actividad destinada a esto debería entrar en esta categoría, pero seguramente esto no baste.

    Pasemos a otro punto: competición.

    El boxeo, por ejemplo, es una actividad (de momento la definiré así) destinada a la competición, de acuerdo, aunque el boxeador en una situación «real» tiene material de sobra no sólo para defenderse, sino como para encajar y evitar golpes.

    Aún así, si nos centramos en que es una actividad principalmente para competir… ¿Qué pasa con el judo? El judo nace del ju-jutsu, y es una suavizacion del «arte suave» destinada a la competición… ¿Que sirve para la defensa? Por supuesto: tanto como el boxeo, la lucha greco-romana, etc etc…

    ¡Incluso es deporte olímpico! Igual que el Taekwondo, y esperemos, el karate algún día…

    Si es la inexistencia de katas, pumses, u otras formas similares, me agarro al mismo ejemplo, y le sumo el ju-jutsu, entre otras.

    Esto me lleva a un ejemplo curioso: el muay-thay: disciplina de combate, con rituales, danzas rituales que podrían ser el equivalente a katas, y proveniente del muay-boran, antiguo como el mundo…
    ¿Dónde queda?

    Otros ejemplos: la esgrima, sea cual sea la escuela.

    Sea como sea, es una disciplina de combate en toda regla, aunque este destinada a día de hoy a la competición, pero dadle a un esgrimiera un palo afilado y comprobad si puede o no defenderse ante una agresión…

    Esto me lleva al «tradicional»

    ¿Se considera un arte marcial «tradicional» por su antigüedad?

    Entonces, amigos, deberíamos recordar las primeras olimpiadas, y de eso hace ya tiempo. Pancracio, pugilato, lucha greco-romana… Incluso se han encontrado tablillas que muestran los orígenes del boxeo con 6000 años de antigüedad.

    ¿El término tradicional se aplica a la ritualistica? Juego mi carta de la esgrima europea denuevo, por poner un ejemplo rápido y sencillo.

    La única diferencia real que encuentro entre las llamadas «artes marciales tradicionales» y los llamados «deportes de contacto» es el uso de un uniforme.

    • Chiquitín

      Bueno, permíteme aclararte, antes de entrar en materia algo sobre el Muay Thai… sencillamente NO proviene del Muay Boran, el Muay Boran fué un refrito ideado por Marco De Cesaris a principios del s.XX (allás por el 2001-2002) de técnicas tradicionales de las «formas de combate» que usaban cada una de las 7 tribus que compusieron el origen del pueblo tailandés, tal y como lo conocemos hoy, y recopiladas en un manual llamado Chupasart y que podemos encontrar en el Royal Thai Army Museum en Bangkok (una especie de «libro de tradiciones, usos y métodos de entrenamiento» como los que se guardan en varias familias «poseedoras» del libro de X o Y estiló de Kung Fu como el Choy Lee Fut, por poner un ejemplo). … «Danzas rituales equivalentes a katas» ???? madre mía, ahí se nota tu total desconocimiento de lo que significa el Ram Muay-Wai Kruu (y por ende el Muay Thai), no entiendo porque hay quien quiere usar ejemplos para soportar tesis sin saber nada de dichos ejemplos… lo dejaremos ahí que no pretendo hacer un monográfico sobre el Muay Thai. Te dejo un enlace que me parece que explica de una manera muy fidedigna y con cierto rigor, la historia del MT y lo que es el Ram Muay-Wai Kruu.

      http://www.tigermuaythai.com/phuket-thailand/about-muay-thai/history.html

      Entrando al tema … un arte marcial, como su nombre explica (y que etimológicamente ya has desgranado antes) es un método, forma, estilo de combate destinado a la guerra, por lo tanto buscando la derrota del rival dentro de una batalla sin reglas, ni límites, tan sólo la lucha por la vida y la muerte.

      En cambio, deporte (ya sólo con esto la diferencia se hace obvia) de combate o de contacto, está pensado (aunque algunos sean evoluciones o adaptaciones de estilos marciales (para la guerra)) para, bajo unas reglas, normas y límites y como objetivo tiene el prevalecimiento en una competición deportiva.

      Otra cosa, es que si yo soy veterinario, no sepa extraer una bala de un ser humano (por poner un ejemplo fácil que hemos visto en muchas pelis) ya que los conocimientos de anatomía, antisépticos, medicinas, usos de material quirúrgico…. sean compatibles. Lo mismo pasa con el caso que nos ocupa… un boxeador, al fin y al cabo, se entrena para dar golpes y para intentar recibir los menos posibles…seguro que puede ser un durísimo rival ante cualquier agresor aunque no tenga contemplado en su entrenamiento el golpear los testículos, sacar los ojos o hundir la nuez de su rival (por poner un ejemplo)… eso ya va con la mala leche e instinto que tenga cada individuo.

      También, y es un tema que he tratado muchísimas veces con maestros de diferentes artes marciales, creo que el entrenamiento es a veces muy poco realista y con poco contacto (por la supuesta mortalidad de algunas técnicas) en muchas artes marciales, llevan a sus alumnos a un falso estatus de seguridad en sus reacciones bajo presión, que se ven muchas veces fatalmente desmontadas a la hora de hacer frente a una agresión real (ojo, que otras tantas no)

      En fin, que yo sí que creo en las diferencias de base y de uso entre deportes de contacto y artes marciales.

      Un saludo.

  7. Davidelmistico

    Cierto, no conozco el muay thay tanto como debiera, la verdad, y tal ve no he usado los términos correctos, te lo concedo.

    Pero… ¿En serio me dices que gente que no ha recibido un golpe medio en serio en su entrenamiento ni una vez se entrena más seriamente para el combate que gente que combate con otros en igualdad de condiciones?

    Con respecto al reglamento, aún no he conocido un Dojo en que se permita el «todo vale, sácale los ojos a tu rival».

    Pienso más en que cada cual entrena lo que considera más importante, la verdad.

    De todas maneras, me sigues dejando con la duda de las disciplinas olímpicas. ¿Son? ¿No son? ¿Qué son?

    ¿Es el practicante de kendo artista marcial y el esgrimista de la escuela de Bonetti no?

    • Chiquitín

      Veo que no acabo de explicarme en condiciones …. culpa mía.

      NO estoy hablando de la mejor o peor preparación ante una agresión de uno u otro.

      NO estoy hablando de la gramática y la semántica de marcial o deporte

      NO estoy diciendo que HOY en día, se desarrollen las artes marciales como lo que fueron concebidas (para matar en la batalla)… evidentemente.

      Tan sólo me centro en lo que se da a entender como «arte marcial» y «deportista de contacto» para el 99% de la población (tanto practicantes como no) y que basándose en ese significado popular, Antonio Leyva desarrolla su artículo. Y basándome en ese sentido de cada uno, el arte marcial es aquella forma de combate/método de entrenamiento concebido para la guerra … y el deporte de combate/contacto es una disciplina deportiva con reglas, límites definidos y, muy importante para la diferenciación, puntuaciones/méritos que está concebida para una competición deportiva (aunque el deporte consista en en liarse a tortas con otro)

      Un día podríamos ponernos a desgranar cuan eficaces , o no, son ciertos sistemas o formas de entrenar, en especial en artes marciales «tradicionales» … me da la impresión que en ese aspecto tenemos posturas muy parecidas.

      Un saludo
      Chiquitín

      PD : solo una cosa más … y lo digo sin acritud, ni con ánimo de ofender ni de ser pedante… es un tema que me he propuesto corregir siempre que pueda : es Muay Thai (no Thay) … «Muay» significa lucha y «Thai» es de Thailand … así que es «Lucha Tailandesa» (al boxeo inglés, lo llaman Muay Sakon «Lucha Sajona»).

  8. antonioleyva

    Poco que añadir a lo dicho por Chiquitín.
    El objetivo del artículo era dejar sentado que la idea de que una persona que practica un deporte de contacto puede y en muchas ocasiones es, mejor kilo a kilo que gran parte de los practicantes de «artes marciales». Y aunque considero que la idoneidad de un arte marcial, enfocado por definición a la defensa personal en situaciones reales, frente a un deporte de contacto, ideado para ganar en un juego reglado, es evidente, no lo es menos que el aspecto de realidad presente en un deporte de contacto, no puede ser olvidado, porque la realidad es que esa faceta del contacto, la manejan en general mucho mejor que los «artistas marciales».

    Y todo ello a pesar de que parten de una herramienta, un deporte de contacto, que por objetivos y métodos, es de entrada de menores prestaciones que un arte marcial enfocado a la defensa personal en situaciones no regladas. Algo estarán haciendo mejor…

  9. gru_gru

    Llevo casi 30 años practicando karate. Nunca, jamás, ni antes de estos 30 años me he pegado en serio con nadie, ni en el dojo ni en la calle.
    No entraré en disquisiciones de si las AAMM son más, diferentes, mejores o peores que los DDCC. Lo que si tengo claro es que en una situación de riesgo, agradeceré estar (más) preparado física y psicológicamente que una persona que jamás haya visto un -gi (o un obi).
    He tenido la suerte de entrenar con «grandes» del karate y siempre me enseñaron a evitar la violencia y «salir corriendo» (no confundir con cobardía) ante cualquier situación de riesgo, pero si se diese el caso, al menos tendré algo más de agilidad y previsión que alguien que nunca haya practicado ningún tipo de DDCC o AAMM.
    Lo que no tengo tan clara es la diferencia entre DDCC y AAMM .. para mi ambos son (casi) lo mismo.
    Los tiempos evolucionan y como alguien ha comentado, ya no se practica Capoeira para defenderse los esclavos de los «amos», ni se practica el karate de Okinawa (p.e.) para salvar la vida de los ataques de los señores feudales. Evidentemente cualquier parecido de lo que practicamos hoy con el original es pura coincidencia….
    En la película ¿en busca del arca perdida?… sale una escena en la que aparece un «samurai haciendo cosas con sus espadas» con intención de cargarse a Harrison Ford.. una vez hecha la «coreografía» de turno, Ford saca su pistola y le pega un tiro.
    Concluyendo, yo siempre he practicado karate-do como disciplina, no como AM con intención de ir pegándome por ahí. Vivo el «espíritu» y eso es algo que muy pocos saben enseñar o transmitir.
    Y después de estos 30 años, sigo con mi «cinto marrón», porque mis distintos maestros «me han obligado» a ponérmelo. No me planteo de momento pagar 130 euros para que alguien me diga que ya me puedo poner el negro y no se qué «dan».

    ¡¡ OSS !!

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